NOTICIAS

Cómo deshacerse de un coche viejo

Abandonar un coche en la calle está castigado con multas que pueden llegar hasta los 30.000 euros. Si no quieres arruinarte y, además, pretendes sacar un último beneficio económico a tu viejo vehículo, toma nota. Te contamos cómo deshacerse de él antes de comprar uno nuevo

Hay un momento al que, prácticamente, llegan todos los conductores: deshacerse de su viejo vehículo. Las razones pueden ser tan diversas como la oferta del mercado, pero, lo cierto, es que la mayor parte de las veces llegan a ese punto porque están pensando en comprar un coche nuevo. Y despedirse del antiguo no es tan sencillo como dejarlo en la calle, sobre todo porque la sanción económica que acarrea esta acción puede llegar hasta los 30.000 euros.

Teniendo en cuenta esto, es importante saber qué posibilidades existen para desprenderse de un coche: desde entregarlo en el concesionario hasta venderlo pasando por entregarlo a un Centro Autorizado de Tratamiento de Vehículos (CATV) para que lo reciclen correcta y respetuosamente. Te explicamos cómo proceder con cada una de ellas.

Deshacerse de un coche obteniendo un beneficio económico

Cuando un conductor decide despedirse de su viejo coche, éste puede ser aprovechado por otros. Si el estado de conservación es suficiente, el propietario le sacará una última rentabilidad económica que podrá ir desde un descuento en el precio de compra de su nuevo vehículo hasta una pequeña cantidad por determinadas piezas.

Vender el coche a un concesionario

La opción más recomendable (y también la más lógica) pasa por vender el viejo vehículo a un establecimiento de coches de ocasión o al concesionario donde se ha decidido comprar el nuevo. Tanto en un caso como en otro, el valor del vehículo será más alto cuanto mejores sean sus condiciones. Es decir, si ha superado la ITV sin faltas, si goza de un buen historial de tráfico y si, además, cuenta con un libro de mantenimiento que incluya todas las revisiones estipuladas.

El descuento o el precio por el que lo comprarán dependerá del estado del vehículo que se entregue; lo recomendable es que el coche tenga menos de diez años desde su primera matriculación. La tasación no sólo se basa en este factor, también en la marca, modelo, motor, cilindrada o kilómetros, entre otros. Con el objetivo de no ir a ciegas, el conductor puede realizar su propia valoración a través de Eurotax o usando la guía de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos A Motor (GANVAM). Es un boletín de estadísticas sobre coches de ocasión en el que figuran las valoraciones por marcas, vehículos y edad.

Teniendo en cuenta que, actualmente, las ayudas del Gobierno para la adquisición de vehículos no contemplan aquellos con motor térmico e, incluso, los híbridos, ambas opciones son una buena oportunidad. Y es que la mayoría de los concesionarios aceptan coches (de la propia marca y de ajenas) a cambio de hacer una rebaja en el importe final de la compra. Por lo tanto, el propietario tendrá que investigar para comparar precios, negociar y, finalmente, encontrar el establecimiento con la mejor oferta.

Cómo deshacerse de un coche viejo

Vender el coche a un particular

Una vía semejante es la de vender el coche a un particular. Para ello existen multitud de revistas, páginas web o foros que ofrecen la posibilidad de anunciar el vehículo de forma gratuita. Si se opta por esta vía, quizás, el propietario consiga un beneficio económico algo mayor que si elige venderlo a un concesionario o a un establecimiento de coches de ocasión.

Eso sí, hay que tener en cuenta los trámites que implica esta opción como, por ejemplo, la redacción y firma de un contrato de compraventa. La DGT los detalla en su totalidad dentro de la sección Transmisiones y Cambio de Titularidad. A esto hay que añadir el Impuesto de Transmisiones que se debe pagar a Hacienda.

Vender el coche por piezas

El dueño del coche puede intentar sacar un último beneficio a su vehículo intentando vender las piezas que aún sean de utilidad. Lo más recomendable en estos casos es realizar un inventario y ponerlas a la venta (con una buena descripción e ilustradas con el mayor número de fotos posible) en los diferentes portales especializados que existen para tal fin. Si hay suerte, lo lógico es que haya componentes que sean más fáciles de vender como aquellas piezas que son difíciles de encontrar o los que son fungibles, es decir, los que pueden sustituirse por otros de la misma categoría.

Ir a un taller

Cuando el coche no ofrece muchas garantías para seguir dando servicio a un próximo conductor, hay algunos propietarios que deciden venderlo a un taller. En este caso, tendrá que exponer su situación explicando el estado y las características del vehículo. Será entonces cuando los diferentes establecimientos lo evalúen para saber si se puede sacar algún rédito. Si la respuesta es afirmativa y encuentran un comprador o les interesan determinadas piezas, el taller arreglará los fallos y averías existentes para, después, ofrecer un porcentaje del precio de venta al propietario.

Ir a un desguace

Cuando la única opción pasa por vender el coche (o lo que queda de él) a un desguace, conviene armarse de paciencia. La búsqueda deja de tener objetivo del establecimiento que te da más para pasar a aquel que te dé algo. Por ello, hay que tener en cuenta el precio del hierro pesado y ligero:

Precio por toneladaPrecio por kilo
Hierro pesado250 euros0,25 euros
Hierro ligero240 euros0,24 euros

Teniendo en cuenta que un coche se compone, además, de aluminio, acero o plástico, entre otros, las cuentas llevan a pensar que por el chasis se podrían conseguir, aproximadamente, 80 euros. Por el vehículo completo sería algo más: unos 100 euros. Y es que no hay que olvidar que los desguaces asumen el transporte además del procesamiento del coche y de sus contaminantes. Después de todo esto, tiene que sacar algún beneficio de lo que queda. Tampoco hay que perder de vista las multas que existen por desguazar vehículos y vender las piezas sin los permisos pertinentes porque pueden llegar hasta los 60.000 euros.

Deshacerse de un coche sin beneficio económico

Si el conductor no está buscando sacar rentabilidad económica a su viejo coche, existen alternativas para deshacerse de él. Éstas pasan por gestionar el proceso él mismo o dejarlo en manos de otras empresas.

Dar de baja un vehículo

El proceso para dar de baja un vehículo de manera definitiva se lleva a cabo a través de un Centro Autorizado de Tratamiento de Vehículos o desguace (CATV). Es un trámite por el que no hay que pagar ninguna tasa, pero sí es necesaria la siguiente documentación:

  • Solicitud en impreso oficial
  • Identificación del propietario del coche
  • Permiso de circulación
  • Tarjeta de ITV

Existe la posibilidad de delegar en empresas especializadas que llevan a cabo este tipo de operaciones. Si es el caso, el usuario debe solicitar el justificante en el que aparezcan tanto los datos del vehículo como del CATV que ha tramitado todo y en el que se indique, específicamente, que se trata de una baja definitiva.

Dejarlo en manos de un tercero

Cuando el dueño de un coche acude a un desguace o a un Centro Autorizado de Tratamiento de Vehículos (CATV), lo más normal es que no obtenga beneficio económico alguno. Eso sí, se antojan como una de las formas más inmediatas y cómodas.

Desguaces

Si la opción elegida es un desguace, lo más recomendable pasa por hacer una investigación previa en dos direcciones. La primera de ellas consiste en averiguar si alguno de ellos podría pagar algo por el coche completo; si es así, será muy poco. La segunda es saber si el desguace elegido tiene todos los procesos estructurados y los sellos de calidad AENOR.

Independientemente de su tamaño, se trata de un servicio que se basa en tres pilares: venta de piezas, reciclaje teniendo en cuenta las premisas medioambientales y compactación de chatarra para darle un uso posterior. El proceso habitual pasa por recoger el coche y llevar a cabo los trámites de baja de forma gratuita. Eso sí, en determinados casos, debido a la situación geográfica del vehículo, puede que el dueño tenga que pagar por el servicio de grúa. En un corto plazo de tiempo, lo darán de baja y enviarán al dueño el justificante de destrucción. Lo único que piden a cambio es la documentación necesaria para este tipo de trámites.

Cómo deshacerse de un coche viejo

Centros Autorizados de Tratamiento de Vehículos (CATV)

Hoy en día, los desguaces están siendo sustituidos por centros más ecológicos y limpios. Conocidos como Centros Autorizados de Tratamiento de Vehículos (CATV), se han convertido en la opción más cómoda y económica para dar de baja definitiva a un vehículo viejo. Además de ser la vía más respetuosa con el medio ambiente.

Todas las comunidades autónomas cuentan con puntos de este tipo y la web de la DGT tiene un servicio de localización para los propietarios. Ponen a disposición del usuario un servicio gratuito de grúas, realizan gratis los trámites de solicitud de baja y certificado de destrucción y aseguran el tratamiento correcto del vehículo. Lo único que precisan por parte del dueño es la documentación necesaria.

Compartir:

Facebook
Twitter
LinkedIn

Solicita más información

Recibe una oferta personalizada o agenda una cita con un concesionario oficial del modelo elegido.